Cada poco tiempo vivimos etapas en las que un color o una paleta de color concreta está de moda. Hace poco lo vimos con la temática futurista y cyberpunk, cuando se empezó a usar mucho los colores tipo neón. O actualmente con la estética neo-brutalista como vimos hace pocas semanas, como mucho uso de colores primarios. Pero hay una paleta de color que parece que continua presente a pesar de las modas, sobre todo en unas temáticas muy concretas. Nos referimos a los colores y tonos pastel.
Es habitual que, cuando veamos un diseño que hace uso de los espacios en blanco, necesite de algún color de fondo. Pero como seguro que sabéis, no es muy recomendable usar el blanco puro, al igual que el negro puro, cuando estemos diseñando. Por eso es habitual tirar de tonos pastel para este tipo de situaciones. Pero puede que queramos crear una paleta completa con este tipo de colores, y aplicarlo por completo en nuestro diseño o web. Pero, ¿sabemos con certeza si esta clase de colores es apropiada para nuestro proyecto y el mensaje que vamos a ofrecer?. ¿Cómo podemos crear una paleta de colores pastel personal, y sin tener que acudir a alguna ya prediseñada que encontremos online?.
Estas y otras preguntas son algunas de las que queremos resolver en este artículo. Así que no tardemos más y empecemos.
Psicología detrás de los colores pastel
En primer lugar, vamos a ver cual es el significado y las sensaciones que nos provoca de forma inconsciente el visualizar cualquier elemento o diseño que haga usos de tonos pastel. Por una parte, su aspecto nos produce una sensación de calma y tranquilidad. Al contrario de lo que ocurre con colores más vibrantes, que son muy llamativo y en ocasiones hasta violentos, los colores pastel suavizan todo lo que tienen alrededor, y hace que podamos estar observándolos durante mucho tiempo.
Por eso, dependiendo del target al que nos vayamos a dirigir, el uso de tonos pastel va a hacer que nuestro mensaje cale de forma más natural.
Usos de los colores pastel
Una de las mayores ventajas de los tonos pastel es que podemos usarlos en más tipos de proyectos de los que podemos pensar en un principio. Por ejemplo, esta clase de colores se asocian fácilmente al periodo primaveral y de verano, sobre todo si utilizamos colores cálidos, como los naranjas, amarillos y rojos.
Por otro lado, y quizás sea donde la mayoría lo hemos visto alguna vez, es ligados a temáticas de maternidad y feminidad. Podemos encontrarlos tanto en diseños de interiores para habitaciones de bebés, como en blogs sobre embarazos. Aquí tenemos un amplio abanicos donde aplicar su uso.
Pero también hay bastantes ejemplos de su uso en ámbitos masculinos y deportivos, sobre todo jugando con el contraste con colores más oscuros, y creando un juego de contrastes muy interesante.
Por último, también podemos utilizar los tonos pastel para asociarlos a dos décadas muy concretas: los 50 y los 80. Sobre los 50, es habitual encontrarlo en muchas de las fotos de diseño de interiores, como salones o cocinas, o incluso para decoración de restaurantes.
Como crear nuestros propios colores pastel
Podemos crear un tono pastel a partir de cualquier color primario. Eso sí, antes debemos tener claro los conceptos matiz (hue), saturación (saturation), y brillo o luminosidad (brightness) que explicamos en nuestro artículo sobre el código de color HSL. Así, definimos un tono pastel será aquel con cualquier valor de matiz, un valor de saturación medio/alto y un valor de luminosidad alto. Sabiendo como modificar estos valores de un color, podemos crear nuestros propios tonos pastel. Veamos un ejemplo práctico de como hacerlo.
A partir de aquí, se abre un mundo de posibilidades para crear nuestros propios tonos pastel a partir de los colores primarios que queramos. Y, ya de paso, poder construir nuestras propias paletas y combinaciones de colores pastel.
Paletas y combinaciones de colores pastel
Ya vimos en Silo como crear paletas de color en 3 pasos de forma sencilla. Eso sí, ¿podemos aplicar estos principios si estamos trabajando con colores pastel?. Nos referimos a usar colores complementarios, tríadicos, contrarios, etc. La respuesta es simple: por supuesto que podemos hacerlo.
Y es que estas combinaciones de colores funcionan perfectamente si estamos usando tonos pastel. Por supuesto, podemos utilizar otros principios que seguro que conocéis como es el del contraste, poniendo en contraposición tonos pastel con colores con un valor de luminosidad bajo que actué como contraposición. Ideal para usarlos en textos que queramos que sean legibles, o para elementos que tengan un potencia sobre el resto del diseño.
Otra opción es usar una paleta de colores pastel monocromática. Es decir, sin movernos del mismo matiz de color, jugar con la luminosidad y la saturación para conseguir una pequeña diferenciación entre los tonos, pero sin salirnos de los colores pastel.
Conclusiones
Como hemos podido comprobar, el margen de uso que tenemos con los colores pastel es bastante más amplio del que podemos pensar en un principio: maternidad, primavera, estética retro de los 50… Pero no solo se queda ahí, sino que podemos incorporarlo a cualquier otro diseño del que queramos que tengan un halo de tranquilidad y relax.
De la misma manera, crear una paleta de colores pastel desde cero es muy sencillo, ya que solo tendremos que modificar el brillo y la saturación de cualquier color que vayamos a usar para convertirlo en un tono pastel. Además de que las combinaciones entre ellos siguen las mismas reglas que con cualquier otro tipo de color.
Esperamos que os haya servido de ayuda este artículo, y que los colores pastel formen parte de vuestra colección de recursos en futuros proyectos. Como siempre, tenéis disponibles los comentarios para hacernos llegar vuestras dudas, sugerencias y experiencias sobre este tema.
